lunes, 28 de septiembre de 2009

Somos agraciados

El pasado sábado celebrábamos en la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe de Badajoz la asamblea diocesana del Movimiento de Profesionales Cristianos. En la misma hicimos propio el objetivo establecido para todo el movimiento: "Ética en tiempos de crisis. Humanizar la profesión hoy."
En medio de la debilidad me siento agradecido (agraciado) por porder ir dando pasos en nuestro ser profesional creyente.

domingo, 27 de septiembre de 2009

¿Sabes qué es dar la vida?

Desde el agradecimiento a tantas personas que han hecho tanto por nosotros y por los que están a nuestro alrededor. Esta mujer es maravillosa, pero hay un montón de mujeres y hombres maravillosos que han descubierto en la entrega de su vida, su forma de ser feliz. GRACIAS!!


El video está tomado del blog vocacional de los jesuitas

lunes, 14 de septiembre de 2009

En la Exaltación de la Santa Cruz

Porque Dios no mandó su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salve por él.
Jn 3, 17
Celebramos hoy la exaltación de la Cruz, los cristianos no somos ni mucho menos masoquistas, en este día le pido al Padre la fe suficiente para aceptar su voluntad, para sentirme en sus manos. Del mismo modo le pido que de mis labios no salgan palabras de condena, que tanto hacen sufrir a los otros y que llegue a comprender que su salvación es universal y llega a todos.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Comisión General de Profesionales Cristianos


En el día de ayer se celebró en Madrid la Comisión General del Movimiento de Profesionales Cristianos. La Comisión General, es el órgano de coordinación entre asambleas, y en ella están representadas cada una de las diócesis así como el Equipo Permanente.
En la Comisión, se tomó el pulso a la situación del Movimiento en las diócesis donde está presente. Se aprobaron las líneas de acción para el próximo curso que según la sesión de estudios del pasado mes de mayo tendrá como lema "Ética en tiempos de crisis: descubrir cómo humanizar desde la profesión en el contexto actual".
Una nueva oportunidad para sentir la esperanza de una iglesia que hace una opción por encontrar a Dios en medio de la vida y que busca la liberación de todos. Tendréis más noticias de cómo se va desarrollando el curso.

lunes, 7 de septiembre de 2009

Una invitación a vivir acogiendo a todos

Como mencionaba en la primera entrada hemos sido acogidos por la Iglesia que camina en Perú.
En Lima, Celendín, Miraflores, Choloque, Leymebamba, Chachapoyas, Rodríguez de Mendoza, Nueva Esperanza, Nuevo Chirimoto, Huambo, Sorochuco, hemos encontrado un montón de personas que nos han acogido como si estuviéramos en nuestra casa. De hecho, nos han hecho sentir que estábamos en nuestra casa. Una vez más hemos sentido que hay una forma de vivir el Evangelio que invita a tener casas y comunidades siempre abiertas donde el extraño y extranjero tiene siempre un lugar privilegiado, desarrollando de esta forma la filiación divina que nos hace a todos iguales y hermanos, hijos de un mismo Padre.
Sólo puedo agradecer al Padre el encuentro con tantas personas buenas que nos han acogido. Agradecer cada beso y abrazo, cada sonrisa, cada conversación, cada plato de comida o vaso de café, en ellos he sentido ese Padre que nos cuida a todos y que nos invita a vivir confiados en su Providencia.
Una invitación a estar atentos a todas las personas que a nuestro alrededor necesitan de nuestra acogida y compañía, a desarrollar una acogida sencilla, alegre, en la que se comparte todo lo que somos y tenemos.

sábado, 5 de septiembre de 2009

Una invitación a vivir contemplando...



El viaje comenzaba con una invitación a la contemplación, pasaba la noche en el aeropuerto, ya que salía en la madrugada y pronto advertí que un señor musulmán desplegaba su alfombra para rezar, recordaba aquel texto, que descubrí en un encuentro de universitarios católicos, del libro del Éxodo, cuando le dice Dios a Moisés:

“No te acerques. Quítate las sandalias de los pies, pues el sitio que pisas es terreno sagrado” Ex 3, 5


La realidad que pisamos cada día es lugar de presencia de Dios, y como tal debemos comportarnos. Dios se cruza con nosotros en cada camino, en cada encrucijada. El viaje debía ser también lugar de encuentro con Aquel que nos invitaba a ir al otro hemisferio, a salir de lo cotidiano.
El hecho de cambiar de lugar de residencia, de modificar los hábitos de todo tipo, de vivir en situaciones que no son normales, de adentrarnos en las realdiades de pobreza, hacen que la presencia de Dios sea aun más evidente El viaje ha sido rico en estas experiencias de encuentro, tanto por las personas que nos hemos encontrado, como por las condiciones que hemos intentado cuidar: hemos tenido oportunidad para pararnos a leer en creyente tanto lo que cada uno íbamos viviendo como para compartirlo en el grupo de personas que fuimos desde España. Hemos celebrado la Eucaristía con diferentes comunidades, tanto de la ciudad como en zonas rurales, redescubriendo en ella un sacramento que nos hace a todos iguales por el amor de Dios, que nos permite sentarnos en una misma mesa a personas muy distintas y que nos invita a vivir en una constante acción de gracias al Padre por todo lo que nos ha regalado.
Sólo puede considerarme privilegiado por el placer de notar la presencia del Padre, que se hace el encontradizo conmigo, que se manifiesta en tantas personas y circunstancias y que me anima a no desfallecer.
Quizás esa sería una de las primeras enseñanzas del viaje, resulta necesario pararse aun más para descubrir cuál es la presencia de Dios a nuestro alrededor, cuál es su plan para nosotros.
Le pido, en este inicio de curso, que me dé la suficiente paciencia y confianza para poder disfrutar de todo lo que me regala cada día en mi vida. Ojala, siga siendo sensible a esa presencia en los hermanos, en su Palabra y en el sacramento de la Eucaristía.

jueves, 3 de septiembre de 2009

Viaje a Perú



Como muchos de vosotros sabéis, he pasado el mes de agosto en Perú. Nos ha acogido la Iglesia que camina en las diócesis de Lima, Cajamarca y Chachapoyas. Hemos tenido la oportunidad de conocer “en directo” cómo trabajan algunos de los sacerdotes y religiosas de nuestra tierra, de experimentar sentimientos enfrentados y de conocer a muchas personas. En los próximos días iré publicando algunas de las cosas que me “traigo” de este viaje, otras aun las estoy digiriendo.